August es un niño que nació con un problema de deformidad facial congénita, llamada Síndrome de Treacher Collins. Esto ha impedido que hasta quinto grado asistiera a la escuela pública, pero ya ha llegado el momento de comenzar.
Esta película nos deja varias enseñanzas: Sobre el protagonista August, muestra la importancia que tiene el apoyo familiar y el contexto, para sobrellevar y atravesar situaciones y momentos importantes de nuestras vidas.
Este niño es impulsado por su madre a comenzar la escolaridad, quien deja de lado su propia vida para educar a su hijo, y un padre algo temeroso a la reacción y a la posibilidad del rechazo de sus compañeros. Cuando se incorpora al ámbito académico, podemos ver la importancia que tiene el contacto con el mundo exterior, la socialización y la relación con pares en cada etapa de la vida.
August también es ejemplo del poder de la aceptación: cuando decide quitarse su casco dejarse ver, aceptando sus virtudes y defectos. Así, logra vivir de manera más amena y tranquila, interactuando con los demás, teniendo la seguridad de ser él mismo, y sabiendo que las miradas lo acompañarán siempre ya que, como le dice su hermana:
"no pueden ignorarte si naciste para sobresalir"
Sin embargo, esta película no sólo nos habla sobre la importancia de valorar cada aspecto de nosotros; sino también, cuenta las historias personales de varios personajes, para poder entender el porqué de sus acciones y formas de ser. Esto hace alusión a una frase final que menciona el protagonista cuando dice: "sé amable con todos, cada uno está atravesando diferentes batallas".
Es importante practicar el respeto y la empatía, ya que no sabemos con qué se encuentra lidiando el otro dentro de sí mismo. Estamos atravesados por diversas circunstancias que nos hacen ser y hacer día a día.
¿Y vos, en qué sos maravilloso/a?
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